Lectura biblica: Deuteronomio 6:1-9
Texto del sermon: Isaías 54:13 y todos tus hijos serán enseñados por jehová; y se multiplicará la paz de tus hijos.
Introducción:
No se trata solo de enamorarse, casarse y traer hijos al mundo sin las bases sólidas para afirmarlos y formarlos. la tarea de los padres es cada vez mas difícil ya que competimos con muchas influencias, que en lugar de formar a nuestros hijos tienden mas a deformarlos.
Hay en la biblia 3573 promesas de Dios para nosotros, parte de ellas son promesas para nuestros hijos, estas en parte tienen mucho que ver con los padres.
A. QUE ES UNA PROMESA:
Hebreos 6:17-18
17 Por eso, cuando Dios quiso asegurar que cumpliría su promesa, juró que daría lo prometido sin cambiar nada.
18 Ahora bien, como Dios no miente, su promesa y su juramento no pueden cambiar. Esto nos consuela, porque nosotros queremos que Dios nos proteja, y confiamos en que él nos dará lo prometido. BLS.
Promesa es un compromiso que asume una persona con otra a través de la palabra al comprometerse en el cumplimiento de una acción en concreto. es un ofrecimiento de dar algo a otra persona. Según Dios una promesa no es mas que el sentir de su propio corazón, de hacer un pacto irrevocable con nosotros donde su compromiso supera al nuestro.
Debemos tomar en cuenta que las promesas se alcanzan con fe, paciencia y obediencia el autor de hebreos dice:a fin de que no os hagáis perezosos, sino imitadores de aquellos que por la fe y la paciencia heredan las promesas. Hebreos 6:12.
B. PROMESAS DE DIOS PARA NUESTROS HIJOS
Hijos sanos integralmente.
3ra. Juan 1:2 Amado, yo deseo que tú seas prosperado en todas las cosas, y que tengas salud, así como prospera tu alma.
Básicamente significa: “Sin nada que le falte, que no esté incompleto”; Porque Dios quiere prosperarte en cada área de la vida: espíritu, alma y cuerpo.
Hijos estables y seguros.
Salmos 102:28 Los hijos de tus siervos habitarán seguros, Y su descendencia será establecida delante de ti. La estabilidad, en toda área trae tranquilidad y paz para poder vivir tranquilos. Y la seguridad es lo que mas nos preocupa por nuestros hijos ahora que tienen que salir al colegio universidad, etc.…
Hijos guiados por el espíritu Santo.
Joel 2:28 Y después de esto derramaré mi Espíritu sobre toda carne, y profetizarán vuestros hijos y vuestras hijas; vuestros ancianos soñarán sueños, y vuestros jóvenes verán visiones. No hay seguridad mas grande ni quien dirija los pies de nuestros hijos que el mismo Dios manifestado en el Espíritu santo, Lo necesitamos todos los padres, los hijos, etc. Todos los necesitamos levantemos un clamor por que el poder del Espíritu santo llene, Guie y acompañe a nuestros hijos.
Hijos rescatados del mundo.
Isaías 49:25 Pues esto es lo que el Señor dice: «Se arrebatarán los prisioneros a los soldados y a los tiranos se les quitará el rescate recibido. Yo mismo me enfrentaré con los que se te enfrenten y salvaré a tus hijos.
Esta es una promesa para quienes aun nuestros hijos no están siguiendo la fe nuestra, o los hijos que un día conocieron a Dios y luego se apartaron. Padres no cesemos de orar por ellos que la promesa de Dios se cumple.
Hijos que permanecerán en Dios.
Isaías 66:22 Porque como los cielos nuevos y la nueva tierra que yo hago permanecerán delante de mí, dice Jehová, así permanecerá vuestra descendencia y vuestro nombre.
Lo que mas deseamos nosotros es que nuestro hijos permanezcan en la fe y nuestra descendencia continue por ese camino, pues esta promesa que Dios nos da es la que nos garantiza que nuestros hijos, nietos, bisnietos etc. Permanecerán.
C. LAS PROMESAS SE CREEN Y SE DECLARAN.
Prov. 18:21
La muerte y la vida están en poder de la lengua,. Y el que la ama comerá de sus frutos.
Recordemos que el poder de la vida y la muerte esta en la boca, por eso hablar palabras de bien para los hijos desde que están en el vientre materno le traerá infinidad de bendiciones.
Si los padres han declarado palabras que no son de bendición sobre la vida de sus hijos como: eres necio, no haces nada bien, nunca cambias, es necesario rescatar la identidad de sus hijos con amor y palabras de afirmación a la luz de la palabra de Dios.
Hoy en la actualidad los padres no damos las prioridades necesarias, y nuestra principal preocupación no es atender bien a nuestros hijos sino en lo que dice Lamentaciones 1:11 Todo su pueblo solloza y anda en busca de pan; para mantenerse con vida cambian por comida sus tesoros. Las cosas materiales no podrán reemplazar a Dios, ni el amor ausente de los padres. Todo debe tener un equilibrio y un orden de prioridades.
El deseo de Dios es que desde la infancia lo conozcan y se desarrollen con el conocimiento pleno de su palabra. ANA mama del profeta samuel es un fiel ejemplo; era una madre comprometida con entendimiento que sabía a quién pertenecía su hijo. 1Sam. 1:27 Por este niño oraba, y Jehová me dio lo que le pedí. 28 Yo, pues, lo dedico también a Jehová; todos los días que viva, será de Jehová.
Y adoró allí a Jehová.
No debemos permitir que nuestros hijos hagan lo que quieran por que Dios nos pedirá cuenta de ellos como le pidió a Elí.
1 Sam.2:29-30 ¿Por qué habéis hollado mis sacrificios y mis ofrendas, que yo mandé ofrecer en el tabernáculo; y has honrado a tus hijos más que a mí, engordándoos de lo principal de todas las ofrendas de mi pueblo Israel? 30 Por tanto, Jehová el Dios de Israel dice: Yo había dicho que tu casa y la casa de tu padre andarían delante de mí perpetuamente; mas ahora ha dicho Jehová: Nunca yo tal haga, porque yo honraré a los que me honran, y los que me desprecian serán tenidos en poco.
En esta época de modernidad y tecnología debemos procurar un doble cuidado sobre lo que nuestros hijos hacen, ven y escuchan sobre todo aquello que afecte su entorno.
D. Condiciones para el cumplimiento de las promesas.
la mayoría de las promesas de Dios tienen condiciones. las condiciones que nos da el señor para el cumplimiento de cada una de las promesas bíblicas están en el siguiente versículo:
ÉXODO 19:5 Ahora, pues, si diereis oído a mi voz, y guardareis mi pacto, vosotros seréis mi especial tesoro sobre todos los pueblos; porque mía es toda la tierra.
Las palabras de Dios a su pueblo en el desierto son las mismas para su pueblo hoy en el desierto de este mundo en el cual vivimos. Necesitamos:
- Escuchar y obedecer a su palabra poniéndolo en práctica.
- Nunca olvidarnos del pacto que un día le hicimos en el altar de ser hijos suyos para siempre.
Por último tenemos la promesa de Jehová “vosotros seréis mi especial tesoro”. Lo que nos dice este poderoso versículo es que Dios nos pide dos cosas, hacer la voluntad de Dios y hacer lo que dicta la Palabra.
Que Dios nos ayude siempre.